miércoles, 13 de marzo de 2013

Madurofilia



No busquen en el DSM-IV, no revisen las obras de completas de Sigmund Freud, tampoco lo encontrarán en Lacan, ni siquiera en los libros de Biología para el secundario, mucho menos en la Cosmopolitan o la Ohlalá! La madurofilia, señoras y señores, acaba de ser creada por quien estas líneas escribe y paso a explicarles a que me refiero.

Dicen los sesudos científicos que así como los hombres eligen a las mujeres por el ancho de sus caderas, puesto que ello garantiza la reproducción de la especie, las féminas tenemos tendencia a mirar a los machos jóvenes, erguidos y potentes para conquistarlos y que sean los padres de nuestros cachorros. Así los especímenes jóvenes tienen mayores posibilidades de ser seguidos, acosados, conquistados, acechados …

Sucede que, como siempre que se acerca mi cumpleaños, me pongo a pensar. Sí! Alguna vez tenía que pasar, después de todo es una vez al año que uso las neuronas! Como les decía, me puse a pensar porque he dejado de pertenecer a la manada que persigue a los machos jóvenes y más requeridos y he empezado a observar con otros ojos a los más maduros. Sencillo, señoras, señores, la edad no es pavota y una sabe que hay pocas cosas más allá del sexo que compartir con alguien mucho menor y empezás a valorar una buena charla, una película, un viaje, compartir experiencia y no tener que explicar a que se hace referencia cuando una dice “Te voy a hacer repimporotear en el calabozo” o “No toca botón!”

Las canas comienzan a cotizar en alza, las arrugas tienen ese “no-se-que” que hace crecer la libido y con 40 años empezás a mirar a los supra 45 y tu límite se extiende hasta las sub 55, de repente no te molesta escuchar tangos, charlar sobre Cacho Castaña o Sandro, escuchar como se evocan esas épocas doradas donde se iba a bailar con pantalón pata de elefante o del servicio militar obligatorio, para nada!

Eso, mis amigas, es la MADUROFILIA. El amor por los maduros.

Proceso contrario a la PENDEFILIA que se produce en los varones que pasan por las tan mentadas crisis de los números redondos y que los hace buscar niñas que podrían ser sus hijas para sentirse renovados. Dicho lo cual, los dejó, me voy a buscar una whiscola, a escuchar los discos de Juan Ramón y a recordar los buenos tiempos!

lunes, 4 de marzo de 2013

“Disculpe las molestias, estoy soltera”



Por Dra_Lau
Señoras y señores, pido humildemente disculpas, estoy SOLTERA y no quiero incomodarlos con mi condición. No, por favor, eviten esas caras de compasión, de tristeza por el mal ajeno, esas ansias de solucionar mi sufrimiento, después de todo no la estoy pasando tan mal! Después de todo estar soltera no es una enfermedad contagiosa, es simplemente un estado.
Yo se que a esta altura de mi vida se esperaría que hubiera “sentado cabeza”, estableciéndome, como lo hicieron mis amigas, bah como intentaron hacerlo algunas de ellas, con suerte dispar, algunas se separaron, otras están pidiendo a gritos que alguien las libere o utilice un rifle sanitario con sus parejas y otras, las muy perras, no reconocerán jamàs que la pasan para el traste, pero son las que más fuerzas hacen para que vos compartas su miseria con ellas y todo tipo que pasa cerca de sus ojos es un candidato ideal para “la soltera”.
 También a esta altura se esperaría de mí que fuera ama de casa (jaja), que fuera madre, que no me llenara de compromisos ni buscara formarme política y académicamente … lo siento nuevamente, los VOY A SEGUIR DECEPCIONANDO. Aún hoy hay gente que se espanta si una no tiene como perspectiva en el horizonte tener una familia, una casita, un perro y coger una vez a la semana, si puede ser en fin de semana mejor …
Saben que sucede? ESTAR SOLTERA no es igual que ser SOLTERONA ni siquiera que SER SOLTERA, porque vamos! Soy mujer, soy abogada, soy empleada, soy militante, soy tía pero soltera NO SOY, la soltería es un momento que podríamos considerar de tránsito, viste como cuando estás en el aeropuerto y estás por tomar una conexión con otro vuelvo, en ese momento en que no sos ni llegado ni en proceso de salir sino un PASAJERO EN TRANSITO, bueno ESTAR SOLTERA es transitorio, no es definitivo, se puede dar marcha atrás y de hecho yo, amigos míos, SIGO EN LA BUSQUEDA.
Ojo, con esto no estoy dando rienda suelta para que me presenten a todos los bagres familiares o amigos que andan por ahí sin encontrar su media naranja, NO! No quiero quedar mal con amigos y conocidos, pero las estadísticas y los estudios realizados por la Universidad de … bueno, ya me voy a acordar de donde era, demuestran que la posibilidad de tener un final feliz cuando dos solteros son emparejados por terceros conocidos, son algo así como del 0.00000001% de éxito a 1 año.
Las solteras tenemos nuestro momento de bajón, sobre todo en invierno cuando no tenemos alguien que nos caliente las patas en una noche destemplada, pero créanmelo cuando les digo que se nos pasa rápidamente cuando quien nos caliente las patas RONCA!
Quiero por este medio también derribar el mito de la búsqueda del príncipe azul, jamás buscaría rellenar mis días con alguien de la nobleza, se imaginan  verme emparejada con un cara de nada como Carlos de Inglaterra o Guillermo de Holanda? Lo único azul que puede llegar a alegrarme un poquito es algún que otro capítulo de Los pitufos o por supuesto un anillo de zafiro …
Entonces, iniciemos una campaña de concientización para las mujeres casadas, las solteras no somos nocivas, ni siquiera somos una amenaza para su estabilidad matrimonial, lo más probable es que tu peor es nada te ponga sendos cuernos con otra casada, que lo hinche menos, les exija poco y tengo tiempo limitado de encuentros. Mientras tanto, a las solteras DEJENNOS VIVIR!