pero también este post podría llamarse "¿Alguna vez te he contado que me ha caído un rayo?... 7 veces!"
Veamos, cuando uno elige ver este tipo de películas puede ser bajo dos formas: habiendo leído las críticas de los diarios sobre la misma o esperando sentirse gratamente sorprendida. A mí me sucedió un mix entre las dos, porque habiendo leído las críticas de los diarios y visto los avances en el cine y la TV salí del cine más que gratamente sorprendida por un filme que me provocó una mezcla tremenda de sensaciones y sentimientos.
Vamos por parte, el elenco encabezado por Brad Pitt (Benjamin Button) y Cate Blanchett (Daisy Fuller) cuenta con una energía muy poderosa que va de mano en manos entre personajes centrales y meros colaboradores en la narración de la historia, son tan importantes estos dos actores como Quennie (Taraji Henson) como la madre adoptiva de Benjamin, la misteriosa Elizabeth Abott (Tilda Swinton), la confundida Carolina (Julia Ormond) o el capitán Mike (Jared Harris) del barco en el que BB comienza la aventura que definiría su vida o el simpático anciano que narra a lo largo de la historia las 7 veces en que fue alcanzado por un rayo y al que una espera ansiosamente para saber como fue el próximo infortunio.
Benjamin nace el día en que Alemania se rinde a los aliados en el marco de la Gran Guerra, pero el parto provoca la muerte de su madre y la locura instantánea del padre que ve horrorizado como luce su hijo, un anciano en el cuerpo de un bebé, y decide abandonarlo en una casa luego de haber intentando arrojarlo al río. Es así que aparece Quennie, quien va a oponerse a todos los pronósticos de una cercana muerte del pequeño y se dispone a criarlo en el asilo de ancianos donde trabaja.
Ningún sitio parece el más apropiado para el pequeño y maltrecho Benjamin. Allí conocerá un mundo nuevo y a su gran amor, Daisy, la mujer a la que el destino vinculará por siempre. No voy a contarles detalles ni tampoco abundar en lo obvio, excepto en el hecho de que Brad Pitt está más que apetecible, verlo corriendo con su moto por las rutas hacen que una quiera demostrarle lo maternal que puede ser ... En fin!
El director capta a través de imágenes y sonidos realmente impactantes una historia digna del realismo mágico latinoamericano pero que se basa en el cuento escrito Scott Fitzgerald. Plantea interrogantes aún no resueltos por la sociedad ni por la ciencia y creo que nos deja pensando sobre la calidad con la que vivimos nuestras vidas, el respeto por los ancianos, los prejuicios y por supuesto da una nueva vuelta de tuerca sobre el amor, ese sentimiento tan maravilloso y tan complicado a la vez.
Que más decirles que vayan a verla y que le doy 5 Lauritas.
Vamos por parte, el elenco encabezado por Brad Pitt (Benjamin Button) y Cate Blanchett (Daisy Fuller) cuenta con una energía muy poderosa que va de mano en manos entre personajes centrales y meros colaboradores en la narración de la historia, son tan importantes estos dos actores como Quennie (Taraji Henson) como la madre adoptiva de Benjamin, la misteriosa Elizabeth Abott (Tilda Swinton), la confundida Carolina (Julia Ormond) o el capitán Mike (Jared Harris) del barco en el que BB comienza la aventura que definiría su vida o el simpático anciano que narra a lo largo de la historia las 7 veces en que fue alcanzado por un rayo y al que una espera ansiosamente para saber como fue el próximo infortunio.
Benjamin nace el día en que Alemania se rinde a los aliados en el marco de la Gran Guerra, pero el parto provoca la muerte de su madre y la locura instantánea del padre que ve horrorizado como luce su hijo, un anciano en el cuerpo de un bebé, y decide abandonarlo en una casa luego de haber intentando arrojarlo al río. Es así que aparece Quennie, quien va a oponerse a todos los pronósticos de una cercana muerte del pequeño y se dispone a criarlo en el asilo de ancianos donde trabaja.
Ningún sitio parece el más apropiado para el pequeño y maltrecho Benjamin. Allí conocerá un mundo nuevo y a su gran amor, Daisy, la mujer a la que el destino vinculará por siempre. No voy a contarles detalles ni tampoco abundar en lo obvio, excepto en el hecho de que Brad Pitt está más que apetecible, verlo corriendo con su moto por las rutas hacen que una quiera demostrarle lo maternal que puede ser ... En fin!
El director capta a través de imágenes y sonidos realmente impactantes una historia digna del realismo mágico latinoamericano pero que se basa en el cuento escrito Scott Fitzgerald. Plantea interrogantes aún no resueltos por la sociedad ni por la ciencia y creo que nos deja pensando sobre la calidad con la que vivimos nuestras vidas, el respeto por los ancianos, los prejuicios y por supuesto da una nueva vuelta de tuerca sobre el amor, ese sentimiento tan maravilloso y tan complicado a la vez.
Que más decirles que vayan a verla y que le doy 5 Lauritas.